"Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su Nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios"
Juan 1:12
Todos hemos pecado y estamos destituidos de la gloria de Dios (Romanos 3:23) El Señor no quiere que estemos lejos de Él, quiere que estemos en contacto con Él, que platiquemos con Él. Él quiere bendecirnos. Por ello, Dios envió a su Hijo a este mundo a morir en la cruz y resucitar al tercer día para que seamos libres del pecado y de la maldición que pesaba sobre la humanidad.
Cuando usted acepta a Jesús como su Señor y Salvador, usted adquiere derechos de hijo, la mesa del Señor que está llena de alimento y postres de bendición para su vida está disponible siempre y cuando usted crea y tenga fe.
Como hijos, también tenemos deberes como el asistir a una iglesia donde se predique la Palabra de Dios, se lea la Biblia y se adore a Dios; guardar nuestra vida, nuestro corazón del mal (Proverbios 4:23) amar y respetar a las demás personas (Mateo 22:29) etc.
Cuando usted acepta a Jesucristo en su vida, usted abre un canal de comunicación con su Padre Celestial, un canal de bendiciones para su vida, para su familia, para su trabajo y mucho más. Usted se salva de la condenación eterna (Apocalipsis 20:15) Permita que Jesús lo inscriba en el libro de la vida ¡Acéptelo hoy!
Problemas se presentarán a su vida como a los demás, pero, NO es lo mismo afrontar los problemas con Dios que sin Él. El respaldo de Dios como su Padre lo tendrá siempre, porque usted está revestido de la sangre de Jesucristo en su vida.
Dios no desampara a los que le buscan (Salmos 9:10), más si usted tiene a Jesús en su vida.
Todo lo que pida al Padre en el nombre de Jesucristo, Él lo hará (Juan 14:13-14)
Acepte a Jescristo hoy ¿Qué espera? No permita que su vida se vuelva difícil, puede ser tarde. ¡Dios le bendiga!
