jueves, 26 de julio de 2012

Jehová ayuda a quienes confían en Él

JEHOVÁ AYUDA A QUIENES CONFÍAN EN ÉL
10 ¿Quién hay entre ustedes que teme a Jehová y oye la voz de su siervo? El que anda en tinieblas y carece de luz, confíe en el Nombre de Jehová y apóyese en su Dios



"Dios no desampara a los que le buscan"
 
Hace un tiempo, mi persona fue a prisión a causa de una calumnia tan ponzoñosa que me separó de mi familia, de mi trabajo y de todas las cosas buenas de las cuales estaba acostumbrado. Fueron cinco meses de dura prueba donde llegué al extremo de la aflicción.
     
Usted puede estar pasando una prueba muy dura en este momento. Quizá puede pasarlo en un futuro. En prisión me acordé de lo que Dios me enseñó años atrás. Una de ellas era confiar en Él.

Las circunstancias del momento y con la ayuda de Satanás, dudamos de sus promesas, pero Dios, siempre nubla el consejo del diablo inyectándonos confianza cuando lo buscamos en oración.

Si usted está pasando por una tormenta en su vida, ORE a cada momento, comuníquese con Dios. Sólo a través de la oración, Dios le inyectará confianza. Si usted tiene a Jesucristo como su Salvador y Señor, NO TIENE PORQUE TEMER a ese gigante que acecha su vida. No importa el problema, Dios es más grande que su problema.

En mi caso, la calumnia era grave. La pena era de hasta catorce años si me declaraban culpable. Se lo dije al Señor, le recordé sus promesas (Isaías 43:26) le dije que era su hijo (Juan 1:12) Dios no me desamparará (Salmos 9:10) me repetía a cada momento. Si usted está leyendo estas líneas es porque Dios me sacó de esta grave acusación. Dios sabía que era inocente. Pero mi Dios era mi testigo, cumpliéndose la Escritura: "¡Quié me diera que me oyese! He aquí que mi confianza es que el Omnipotente testificará por mí, aunque mi adversario me forme proceso". Dios me libró porque confié en Él, porque durante años, nunca me había dejado y no lo iba a ser tampoco en ese momento.

Dios no miente. Cualquiera que se acerque a él en el día de la angustia, Dios lo librará. Dios conoce el corazón de todas las personas. A mí me libró de ir a la cárcel, de la destrucción de mi vida. Demostró mi inocencia. DIOS NO LO DEJARÁ A USTED, si se acerca a Él con el corazón (Salmo 51:17)

lunes, 16 de julio de 2012

LA ADOLESCENCIA Y LA JUVENTUD
(Eclesiastés 11:9 – 10)

9“Alégrate joven en tu juventud y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia; y anda en los caminos de tu corazón y en la vista de tus ojos; pero sabe, que sobre todas estas cosas te juzgará Dios. 11 Quita pues de tu corazón el enojo y aparta de tu carne el mal; porque la adolescencia y la juventud son vanidad”
La juventud es un tesoro. La cercanía con el Señor debe ser lo más importante en esta importante etapa de la vida
Esta es una edad maravillosa, llena de sueños, ilusiones, planes, proyectos y de muchas satisfacciones. Es la etapa de la fuerza, la belleza, la competencia y de muchos retos. También es una edad de peligros e insatisfacciones. Las tentaciones están a la orden del día. Son muchas las espinas que hay en el camino de la adolescencia y de la juventud. Dios da la libertad de hacer lo que queramos; pero también nos dio la sabiduría para diferenciar entre lo que es correcto e incorrecto; entre lo que puede dañarnos y perjudicarnos y lo que en verdad conviene.
En la adolescencia aparecen “amigos” y situaciones “excelentes” para divertirse. Las drogas que destruyen la mente y las vidas; las enfermedades venéreas por las relaciones sexuales antes de tiempo y muchos otros están al acecho, como leones hambrientos tras su presa, listos para desgarrar vidas y corazones preciosos para el Señor. Acércate más a Dios en esta etapa. Pídele sabiduría y fuerzas para que no caigas en las trampas del cazador que está listo para destruir. Permite que Dios te dirija. Búscale cada día desde tempranito en la mañana..