05 de Abril

PON TU CORAZÓN, TODO TU SER EN EL SEÑOR

(Job 11:13-20)

₁₃“Si tú dispones tu corazón y tiendes hacia Dios las manos; ₁₄ si alguna maldad hay en tus manos, pero la apartas de ti, y no consientes que more en tu casa la injusticia, ₁₅ entonces levantarás tu rostro limpio de mancha, serás fuerte y nada temerás. ₁₆ Olvidarás tu miseria o te acordarás de ella como de aguas que pasaron. ₁₇ La vida te será más clara que el mediodía; aunque oscurezca, será como la mañana. ₁₈ Tendrás confianza, porque hay esperanza; mirarás alrededor y dormirás seguro. ₁₉ Te acostarás y no habrá quien te espante; y muchos suplicarán tu favor”.

Las promesas del Señor son para todos. Hay algunos requisitos que debemos cumplir y uno de ellos es disponer nuestro corazón a Él. ¿Por qué nos cuesta tanto disponer nuestro corazón y mente a Dios nuestro Creador?

Dios quiere bendecirnos en todo lo que hagamos. Cuando ignoramos al Señor Él simplemente se mantiene a cierta distancia pero a pesar de cómo somos con Él, esa distancia es muy cercana, dispuesto a venir a nosotros cuando le buscamos.

Dispongamos nuestro corazón a Él, busquémosle a diario. Si lo hacemos podremos levantar nuestra mirada ante cualquiera, nuestros temores serán, ante Dios ¡nada! Dios nos promete confianza en todo lo que hagamos. Sólo dispongamos nuestro corazón. No importa la religión que profeses, Dios no tiene religión, Jesucristo nuestro señor y Salvador no tiene religión. Él nos escucha y espera que le busquemos. Ingratos somos cuando lo hacemos sólo en tiempos difíciles. Dios espera por ti todos los días para bendecirte y hacer de tu día uno muy diferente. Hazlo desde hoy. Si has cometidos “errores imperdonables”, recuerda confesárselos al Señor  y pedirle perdón de corazón y Él hará grandes cosas por ti.